¿Qué es un MBA? ¿Qué significa y para qué sirve?
Las siglas MBA son el acrónimo en inglés de Master of Business Administration, o lo que es lo mismo, Máster en Administración de Negocios o Empresas.
Los MBAs –Master of Business Administration– surgieron a principios del siglo XX en Estados Unidos por la demanda de las empresas, que buscaban una nueva orientación en la gestión y dirección de sus organizaciones. El éxito de los primeros programas fue tal que enseguida se crearon decenas de Escuelas de Negocios para desarrollar el concepto MBA. Hoy en día, existen miles de programas MBAs en el mundo, unos de total garantía y competencia, otros no tanto.
Conviene saber qué se debe entender por MBA. El espíritu que inspiró su fundación se mantiene inalterable: un MBA debe estar en la vanguardia de la formación de profesionales y directivos. No puede resultar una versión encapsulada de Administración de Empresas como algunas Escuelas interpretan. Por el contrario, su programa debe configurarse para alcanzar unos objetivos que van mucho más allá de los que persigue un simple curso post-universitario.
¿Qué objetivos se le deben pedir a un MBA?
Los 7 objetivos de un MBA
- Desarrollar las principales habilidades de dirección y gestión
- Conocer y estar alerta a las tendencias de los mercados nacional e internacional
- Saber aplicar las técnicas de management más avanzadas
- Identificar una oportunidad de negocio y cómo enfrentar un proyecto de emprendimiento
- Diferenciarte respecto a otros profesionales y saber aplicar criterios y perspectivas innovadores
- Trabajar en grupo de manera óptima y entender las ventajas de la colaboración
- Sacar lo mejor de ti mismo y desarrollar todo tu potencial
En resumen, se trata de potenciar tus habilidades y competencias, dar un fuerte empujón a tu carrera y saber cómo diferenciarte en un mundo día a día más competitivo en el cual resulta verdaderamente complicado explotar las propias potencialidades y forjar una carrera gratificante. Eso es lo que te debe proporcionar un MBA.
La cuestión es cómo conseguir estos objetivos. Parece obvio que los formatos tradicionales no valen, que replicar el modelo típico universitario es un error. Para articular un MBA efectivo, realmente diferencial, es preciso tener muy claras algunas exigencias. Estos son los requisitos que debe cumplir el MBA capaz de acometer los objetivos anteriores.
Los 7 requisitos de un MBA
- Enseñar a tomar decisiones: que habrán de ser «las mejores decisiones», las que creen más valor para la empresa.
- Mantener perspectiva del mercado: Enfoque Cliente, Posicionamiento Estratégico, Análisis de demanda, Segmentación, son elementos clave que deben aparecer transversalmente.
- La diferenciación es la clave: un MBA debe facilitar los métodos para realizar análisis diferenciales que deriven en propuestas de alto valor añadido; otro elemento transversal.
- Atender al entorno y a las tendencias: resulta esencial conocer los elementos que pueden condicionar el futuro –a corto, medio y largo plazo– de las empresas.
- Metodología interactiva: método de aprendizaje basado en la continua participación del alumno como único medio posible de aprehensión de las enseñanzas.
- Perspectiva práctica y estudio de casos: el contenido debe organizarse a partir de Business Cases que permitan el contraste entre teoría y realidad empresarial.
- Valores complementarios: se trata de conjugar las exigencias clásicas de beneficio y productividad con aquellos valores que armonizan el funcionamiento interno de las empresas como la ética, la empatía o la solidaridad.
Un MBA debe cumplir los 7 requisitos anteriores para ser capaz de potenciar de manera significativa las capacidades directivas y de gestión de un profesional.
